Evidentemente, si los paquetes de software genéricos no satisfacen tus requisitos, no queda otra opción. Sin embargo, ocurre con frecuencia que no se detectan esas necesidades específicas hasta que se ha comenzado a usar un software genérico, tras una inversión importante de tiempo y dinero. Es fundamental hacer un estudio al comenzar, aunque sea rápido y sencillo.
Ser atendido por alguien que se ha ganado tu confianza, que conoce tus circunstancias, necesidades y prioridades, hace que las soluciones se agilicen. Y da tranquilidad.
El software personalizado está hecho para evolucionar. Si prevés cambios en el funcionamiento de tu negocio, comenzar con un software específico garantizará que dichos cambios se puedan implementar con fluidez. Dentro de los programas genéricos, reemplazar uno con otro requiere tanto esfuerzo y produce tantas incertidumbres que ni llega a plantearse, lo que hace que la evolución de la empresa acabe condicionada por las capacidades de su software. Al final ya ni se plantean innovaciones por la dificultad de su implementación.
Contra lo que se pudiera pensar, es frecuente que un software personalizado acabe resultando más económico que alternativas genéricas, especialmente en sectores especializados. Si a esto sumamos la optimización de trabajo para tu operativa concreta, la diferencia en rendimiento económico puede llegar a ser considerable.
Hoy en día los proveedores de software genérico están cambiando a un modelo de suscripción basado en la nube, en el que debes renovar anualmente el derecho a usar las aplicaciones, convirtiéndose en un gasto recurrente y en aumento constante, ya que estás cautivo del proveedor, aprovechándose éste de su posición de fuerza para aumentar el precio de las renovaciones, además de otro tipo de problemáticas, como el hecho de que el programa que cargas cada día está bajo el control total del proveedor y éste introduce cambios según sus intereses, que no siempre coinciden con los tuyos.
Mis clientes adquieren el derecho a usar el software que yo les propociono para siempre, sin fecha de caducidad.
Un software personalizado no se limita a implementar literalmente lo que el cliente solicita, sino que es habitual que se sugieran mejoras y se aporten nuevos puntos de vista. Tu eres el experto en tu empresa, el desarrollador es el experto en lo que los ordenadores pueden hacer por ti.
Contacta para un análisis rápido y progresivo. Tras unos pocos minutos sabrás si es posible que un software personalizado sea la opción correcta para ti. A partir de ahí, podremos empezar a entrar en detalles.
A no ser que hayas llegado a está página después de una larga búsqueda, lo más probable es que te diga que un software genérico es tu opción más racional, pero por preguntar no pierdes nada. Si lo requieres podré darte unas sencillas indicaciones de qué características son las más importantes a la hora de escoger un software genérico, pero no hago recomendaciones de ningún producto.
Mi método de trabajo garantiza que el software que pagas es el adecuado. Porque tú eres el que lo decide. Podrás tomar esa decisión con seguridad, ya que lo habrás usado durante el tiempo que sea necesario. Entonces, y sólo entonces, yo cobraré el importe acordado. Mientras tanto, serás libre de cancelar el proyecto sin tener que dar explicaciones.
Estas condiciones funcionan muy bien para generar confianza y, sobre todo, producir un resultado satisfactorio para el cliente. La mejor forma de iniciar una relación a largo plazo.
Residiendo desde siempre en Bergantiños (A Coruña), ya son muchos años los que llevo aportando soluciones a Empresas y Autónomos. Cada uno de mis clientes es único, no sólo en nombre y apellidos, sino en carácter, forma de trabajo y visión de negocio. Esto hace que en mi enfoque no sólo influya el para qué sino también el para quién. No me dedico a vender programas, sino a prestar un servicio sostenido a largo plazo. Sinceridad, lealtad, confianza y aportación de valor son lo que define la relación con mis clientes.
En desarrollo de software personalizado cada proyecto es diferente, aunque sea para el mismo sector. Así que cada nuevo cliente requiere aprendizaje específico, sin importar cuántas veces haya implementado anteriormente lo que me pide.
Facturación, puntos de venta, control de stocks, fabricación, trazabilidad, registros de obra, requisitos de las Administraciones Públicas (Verifactu, SII, SIANE, SILICIE...), comunicación con sistemas de mando y dispositivos de medida, microcontroladores...
Distribución, estaciones de servicio, gasocentros, panaderías, ópticas, madereras, pequeño comercio...
Windows, Linux, Android, Web...
Desde trabajadores autónomos hasta empresas con docenas de empleados.
Las listas serían muy largas. Y si lo que necesitas es algo totalmente nuevo para mí, tanto mejor.
Mi trabajo es construir, no apagar fuegos. Una gran parte del esfuerzo en mi proceso de desarrollo se dedica a prevenir incidencias. Y, cuando aparece alguna, aplico un proceso que comienza por una solución específica y termina con una solución generalizada, para no sólo evitar que se repita esa misma incidencia, sino también que lleguen a ocurrir otras similares.
Si tu proyecto está dando los primeros pasos y buscas a alguien que se responsabilice del software, que aporte ideas y se implique en tu éxito, puede que me interese.
Envíame un mensaje y te responderé enseguida. Puedes indicarme el medio por el que prefieres que hablemos, horario, etc. Si quieres ir adelantando trabajo, dime a qué se dedica tu empresa y cualquier otra cosa que consideres relevante como, por ejemplo, si ya tienes un programa y quieres cambiar a algo mejor.